Posada de la Galería

Llegué una calurosa y húmeda noche de finales de julio de 1961 con la intención de encontrar una casa para restaurar. La idea me la había metido en la cabeza el primo Oscar D'Esopo, profesor de la Universidad de Puerto Rico, que había vivido y amado Puerto Rico durante treinta años. Él sabía que el programa de restauración del Viejo San Juan acababa de comenzar y me enviaría al Dr. Ricardo Alegría, Director del nuevo Instituto de Cultura.

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