Alegría navideña en la isla

Las fiestas son el momento perfecto para apreciar y reavivar los recuerdos con los seres queridos. Puerto Rico es conocido por tener las fiestas más largas del mundo, empezando en noviembre, en preparación para Acción de Gracias, hasta enero, entre la Epifanía (o también conocido como el Día de Reyes) y concluyendo con el querido festival callejero San Sebastián (o SanSe). 

La Navidad en la Isla se considera el momento cultural cumbre en el calendario de todo puertorriqueño. Interminables fiestas llenan los barrios y hoteles de efervescente alegría, y tradiciones y costumbres únicas que distinguen la ocasión en este rincón caribeño.  

Parte del empeño cultural es la cocina festiva. Una plétora de postres decora las mesas de la gente, independientemente de su clase social. Por ejemplo, por cada ponche de huevo en Estados Unidos, hay coquitos en Puerto Rico. Esta bebida emblemática se elabora con leche condensada, crema de coco, canela y, en ocasiones, ron, aunque la mayoría de las familias tienen sus propias variaciones e ingredientes secretos.

Otros postres icónicos como el tembleque o el arroz con dulce también contienen ingredientes similares con distintas preparaciones en sus recetas, lo que podría plantear una idea intrigante sobre cómo el elemento del coco en la comida puertorriqueña se ha convertido en parte de su sello o marca culinaria (que puede datarse ya en la piña colada, inventada en Puerto Rico en el Viejo San Juan en 1962, aunque muchas fuentes afirman que se inventó en el Caribe Hilton del barrio de San Juan en 1954). 

En el plato principal de las comidas, la gente puede disfrutar de los famosos platos criollos como el arroz con gandules acompañado de amarillos (plátanos dulces), lechón y mucho más. Muchos residentes desean saborear tales manjares a través de divertidas actividades que mejoran su experiencia, como el entrañable chinchorreo. 

Esta actividad ha acumulado ímpetu en los últimos años debido a su amplio atractivo demográfico, desde enfoques familiares a otros sólo para adultos. El chinchorreo suele hacerse con un autobús alquilado para 20-50 personas, completando un viaje de diferentes paradas con quioscos de frituras y lechoneras. Las cuatro ruedas y la carretera abierta no limitan a los individuos del interior del autobús, que no dudan en celebrarlo entre parada y parada. 

Quien se haya perdido a la hora de crear una ruta para este viaje, que no se preocupe. Un buen punto de encuentro para comenzar el viaje puede encontrarse en el corazón de Guavate, situado en el municipio de Cayey. Algunos de los restaurantes de carne de cerdo mejor valorados y más populares de la Isla son "Lechonera Los Amigos"y "Lechonera Los Pinos". Ambos restaurantes ofrecen docenas de platos principales y guarniciones de fácil acceso e incluso una pequeña cafetería para los amantes del café y los postres en "Café Prieto"de Lechonera Los Amigos.  

Esta aventura, tanto para residentes como para turistas, permite disfrutar del aspecto culinario de la extravagancia navideña puertorriqueña. El sabor de las fiestas es sólo el principio para adentrarse en el espíritu de la Navidad y mucho más allá.